jueves, 19 de marzo de 2015

Un día más sin ti.

Hoy vuelve a ser 19 de Marzo.
Es un día cualquiera, un día más, un día menos, en Madrid.
El cielo golpea llorando el cristal de mi ventana.
Un día más.
Un día menos.
Hasta que alguien pronuncia la palabra que para mí es un secreto desde hace cinco años.
Alguien rompe la sintonía de la rutina.
Una persona aleatoria, o quizá yo misma.
Hoy es el día del padre. Y nada tendría por qué trastocar el día. Nada.
Y menos una palabra.
Y menos un día que sólo es un día más. O menos.
El silencio a veces sólo necesita más silencio para ser silencio.
El dolor está ahí. Siempre. Y a veces sólo se necesita más dolor para desgarrar el vientre.
No cojo tu foto. No hay lágrimas ni sonrisas. No hay comidas familiares ni hay llamadas. Ni siquiera hay sol.
Y hoy, que sólo es un día más, me hallo rodeada de alboroto.
En mi habitación, entre las manos, yo sólo tengo silencio.
La fatiga que me oprime el alma se acentúa.
Si es que puede ser más grande.
Te encuentro en la barra espaciadora, en las jotas, en las úes, en las aes, en las enes.
J.U.A.N.
Te descubro bajo las siglas de un día comercial.
"El Día del Padre".
Anagrama. D.E.P.
Y, en la escena delicada, aflora mi tormento. Floreces.
Echar de menos. Aforismo del silencio.
Delirio de amor. Decadencia del tiempo.
Y yo.
Lejos.
Contigo.
En silencio.
Tu silencio.
Tú, silencio.

1 comentario:

  1. la primera vez que te leo, y esto da en el blanco para mi. me ha gustado.

    ResponderEliminar